Si hay algo que odio en la vida es atender el teléfono y escuchar la voz de alguien que me ofrece inciertos servicios -por sumas aparentemente convenientes pero adecuadamente omitidas-, asumiendo que detenta el derecho de pedirme información privada, y rematando cada frase con un diminutivo de mi nombre. Odio eso.
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hay un sinfín de cosas que odio relacionadas al teléfono, a saber: que se descargue el inalámbrico, que me llamen para hacer un sondeo de macri, que no suene, que suene y no sea esa llamada que espero, que me interrumpa cuando no tengo ganas, que me llamen para informarme que no pagué un servicio, que me llamen por un servicio que ya pagué, que me de ocupado cuando llamo y tengo algo importante que contar, que no me contesten los llamados, llamar a la analista para decirle que no voy a la sesión (en ese caso cruzo los dedos para que me atienda el contestador), que popit se olvide de poner el contestador, que suene antes del mediodía... la comunicación me mata!no le cuento sihayalgo, lo deseperante que me resulta en ciertas ocasiones tb el celular y el mail!
ResponderEliminarLa acompaño en sentimiento. Y le agradezco el material para la formulación de futuros odios.
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=-9LqsWFky2Y
ResponderEliminarEl peor servisio que esta gente ofrece telefónicamente: un seguro para cáncer de mama y útero. te prometen que, de tener en el futuro estos males, recibirás un beneficio de 40000 pesos, y te aclaran que no es necesario pagar con ellos el tratamiento, sino que podés usarlos para...arreglar tu casa! qué buen gusto, realmente. a uno le desean cada cosa.
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