Si hay algo que odio en la vida es el baño de los micros. Lo odio. El hecho de estar haciendo un penoso equilibrio, semidesnudos, quizá aferrados a alguna manija para no rozar siquiera el hoyo metálico, químico y amenazante, atenta contra nuestra dignidad humana.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
es muy terrible. ese deseo de no tocar nada de nada, con ninguna parte del cuerpo, ni de la ropa. por qué no podremos mear con el alma directamente, que no tiene posibilidad de rozar el hoyo metálico.
ResponderEliminaranónimo, debo decir que prefiero contar entre mis anécdotas haberme mojado en el baño de un micro antes que afirmar que mi pobre alma hace pis.
ResponderEliminaryo con este título pensé que ibas a odiar que el teléfono te de ocupado, que claramente es algo que odio.
ResponderEliminarodio haber hecho un comentario y no entender si fue publicado o no. entonces lo repito asumiendo el riesgo que al hacerlo perdería toda su frescura.
ResponderEliminarcon este título pensé que odiabas que el teléfono diera ocupado, que es algo que no puedo soportar.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarAnita, el mundoblog no es democrático. Aquí se publica lo que Sihayalgo decide que se publique. Yo sólo respondo a sus órdenes. Y como verás, aprobó tus comentarios.
ResponderEliminarAh, una cosa más, gracias por la inspiración. Compartimos el odio por el teléfono ocupado.
ResponderEliminar